EL PAÍS: La digitalización de la sanidad está progresando. Muchos hospitales y centros médicos, especialmente los de referencia, tienen sus archivos colgados en la nube. El historial clínico de los pacientes se puede consultar en cualquier centro de España.
Pero esa es solo la mitad del camino. Lo que todavía no se hace es cruzar los millones de datos que genera el Sistema Nacional de Salud, como sí se está haciendo en otros sectores. El famoso big data tiene mucho que aportar a la sanidad, por ejemplo para gestionar de forma más eficiente los recursos.
Álvaro Abella, Grabriel de Meztu y Javier de Oca montaron el año pasado IOMED, cuyo objetivo es hacer aflorar toda esa información que hasta ahora solo usa el profesional médico para sus diagnósticos y ponerla a disposición de las herramientas de business intelligence y data analytics que ya existen. “Los datos que se generan en una consulta se podrían emplear para mejorar la eficiencia en la gestión de los recursos, para la investigación clínica o el desarrollo de nuevos productos en la industria. Siempre de forma anonimizada, claro”, subraya De Oca, responsable de desarrollo de negocio de la startup.
“La sanidad se encuentra en la misma situación en la que estaba el management hace 30 años, cuando no teníamos digitalizados los datos de mercados, de stocks y de finanzas y no podíamos sacar cómodamente gráficos para visualizar toda esa información”, insiste.
Imagina que vas al hospital porque tienes un dolor. Tas la consulta, el médico que te ha atendido redactará un archivo, la historia clínica, que se guarda en los sistemas del hospital. Este podría ser un ejemplo: El paciente refiere un dolor intenso punzante en la rodilla derecha desde hace cinco horas que ha sido tratado con Ibuprofeno sin resultados.
La Agencia Espacial Europea se cuenta entre los inversores en esta ‘startup’
“Aunque parezca una tontería, dentro de este texto hay muchísimos datos. Destaca el dolor, pero también es relevante que lo hayas tratado sin éxito con Ibuprofeno. Si multiplicamos esta información por los 320 millones de consultas clínicas que hay cada año en España, imagínate la cantidad de datos que podemos generar”, indica De Oca.
IOMED ha creado una API que, mediante procesamiento de lenguaje natural, comprende y estructura en tiempo real los datos que el médico introduce en el historial. “Nuestra herramienta extrae del texto médico aquellos datos que sean clínicamente relevantes, les asigna códigos y los estructura (los colocar en filas y columnas en un archivo de datos)”. Tras ese proceso, se devuelve esa base de datos al hospital para que pueda ser analizada masivamente por parte del personal del propio centro.
Procesar el océano de datos que genera el sistema sanitario es una necesidad. Todo lo que contribuya a mejorar la gestión de los recursos y a extraer conocimiento de utilidad en base a información que por otra parte ya existe es positivo. Ese es el camino que ha tomado esta joven startup.
Tras recibir una primera ronda de financiación a principios de año y pasar por el programa de mentoring de ESADE en Barcelona, IOMED está a punto de cerrar otra de un importe mucho mayor para financiar el proceso de comercialización. El software, que licencian a proveedores técnicos de los hospitales, ya está en fase de prueba en varias compañías interesadas en incorporarlo a su paquete de soluciones.
La Agencia Espacial Europea es una de las instituciones que han apostado por el proyecto de estos jóvenes. “Entienden que nuestra tecnología puede ser de interés para el espacio”, explica De Oca.