EL PAÍS: Desde hace siete años el centro de salud Puerta del Ángel, que atiende a un área de 20.000 vecinos, abre cada día sin licencia de funcionamiento o actividad. Una negligencia burocrática de la Comunidad que puede salirle muy caro. La clausura del ambulatorio por parte del Ayuntamiento puede producirse pronto, pues este arguye que parte del ambulatorio ocupa terrenos con licencia para uso industrial. “No ha sido acatada la orden de cese de la actividad, la cual sigue ejerciéndose”, se afirma en la enésima acta de inspección, esta del febrero de 2013, a la que ha tenido acceso este periódico.
El presidente del distrito, el popular José Manuel Berzal, firmó a principios de verano la ejecución del cierre por falta de licencia y desde entonces no ha habido ninguna reunión entre el Ayuntamiento y la Comunidad. Por eso el consistorio remite para más datos a la Consejería, con el convencimiento de que esta encontrará un acomodo para los residentes del Alto de Extremadura.
Y la Consejería no niega los hechos: “El centro de salud Puerta del Ángel no se va a cerrar. Presenta un problema administrativo de uso del local que Sanidad está tratando de resolver. En caso contrario, el centro se trasladará a otro local de la zona. Se garantiza la asistencia sanitaria a los pacientes de este centro”.
Sus vecinos, a través de la Plataforma Latina por la sanidad pública, han comenzado a movilizarse en contra de esta decisión. Ya ha habido una asamblea informativa a la puerta del centro de salud y se prevén más. La oposición se suma a la queja. “Pedimos, que el sentido común y la competencia, imperen ante las peleas internas del PP”, sostiene Noelia Martínez, concejala socialista de Latina.
“El ambulatorio estaba en malas condiciones en otro punto de la avenida de Extremadura y hace 10 años la Consejería decidió alquilar un nuevo local", explica José Luis Yuguero, de la plataforma sanitaria. "Durante dos años estuvo vacío, aunque pagaban un alquiler, pero cuando el techo de pediatría se cayó, tomaron la decisión de hacerla mudanza al nuevo. Es un espacio luminoso, limpio, sin aglomeraciones, con buenas instalaciones. Nos dice la oposición que la reforma costó tres millones. Es un disparate que lo cierren", prosigue.
“Es una vergüenza que después de habernos cambiado de centro, con instalaciones nuevas, lo cierren”, escribe indignada Noemí Sandin. En el barrio del Puerta del Ágel viven sobre todo personas de avanzada edad, con recursos escasos y poca movilidad, así que a cualquier vecino joven que se pregunte contesta lo mismo: “¿Qué va a pasar con los abuelos? No pueden desplazarse distancias largas”.
Las cifras oficiales expresan esta longevidad. Así, mientras que la edad media de los ciudadanos españoles en Madrid es 44,6 años, en Puerta del Ángel —que tenía este enero censados a 41.300 vecinos, 4.000 menos que tres años antes— sube hasta los 47,2 años. En una década, de hecho, ha perdido al 5% de su población. Solo el 12,8% es joven (14,5%) y casi la mitad de los mayores de 65 años cuenta con más de 84.
El partido socialista ha registrado varias iniciativas en la Asamblea para preguntar al Gobierno regional desde cuando conocía la falta de licencia, si ha llevado a cabo en estos años algún tipo de actuación para resolver este problema legal o cómo piensa arreglarlo. ¿Cuánto se paga de alquiler? ¿Quién es el arrendador? ¿Se dividirá a los pacientes o se buscará un nuevo local?