Las Noticias de Cuenca: Los vecinos de San Clemente quieren recuperar la plaza de médico que suprimió la política de recortes del SESCAM y están decididos a luchar con todas sus fuerzas para conseguirlo. Señalan que las listas de espera en Atención Primaria no paran de aumentar y como consecuencia de esta situación el servicio de urgencias se colapsa. Los pacientes tienen que esperar hasta 12 días para poder ser atendidos por su médico de cabecera, situación ante la que han dicho ¡basta ya!

De momento han decidido iniciar una recogida de firmas para exigir al SESCAM la reposición de la plaza amortizada por la jubilación de un facultativo, fomentar y acompañar la presentación de reclamaciones ante cualquier incidencia que se produzca, y concentrarse todos los jueves a las 12 de la mañana ante las puertas del centro de salud.

La primera de estas concentraciones ha tenido lugar esta semana y seguirán mientras se mantenga la situación actual. Así lo ha puesto de manifiesto el portavoz de la Plataforma por lo Público de San Clemente, Pedro Aroca, quien señala que fue tras la manifestación que el lunes, 14 de abril, organizó la plataforma, cuando los propios vecinos, en asamblea espontánea, propusieron iniciar estas medidas para hacer valer sus derechos.

La plataforma ya advirtió en su momento de los problemas que conllevaría la decisión de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales de la Junta para los pacientes de un centro cuya Zona Básica de Salud abarca 12.000 cartillas, pertenecientes a los municipios de La Alberca de Záncara, Santa María del Campo Rus, Casas de los Pinos, Casas de Fernando Alonso, Casas de Haro y San Clemente.

Con la supresión de una de las plazas, son seis los médicos que atienden la zona y desde la plataforma insisten en que la calidad del servicio se resiente. Según los vecinos, los propios facultativos reconocen que si tienen urgencias no pueden atender a los pacientes en consulta. “El problema no es ya solo que los tiempos de espera se prolongan 10 ó 12 días, sino que repercute en las urgencias. Los pacientes que no pueden ser atendidos en consulta acuden por la vía de urgencias y con lo que nos encontramos es con el colapso del servicio”, apostilla Pedro Aroca, quien afirma que ésta no es solo una percepción de la plataforma, sino de los usuarios y del propio personal del Centro de Salud.

Desde que en julio de 2013 el SESCAM decidiera amortizar una plaza tras la jubilación de su titular, las 1.600 cartillas que atendía se han repartido entre los tres médicos del Centro de Salud sanclementino, de tal forma que cada uno de ellos asume a día de hoy un total de 2.200 cartillas.

Vecinos y Plataforma dicen que la a anulación de citas y aumento de las listas comenzó a detectarse desde el principio y que las quejas han ido en aumento pero no ha sido hasta ahora cuando los vecinos han decidido no callar ante lo que consideran una tropelía a sus derechos, y hacer visible ese malestar uniéndose en la protesta para exigir la reposición de la plaza.

DIVERSIDAD DE OPINIONES

Desde el Ayuntamiento, su alcaldesa, Mª Sol Herrera, asegura estar confusa ante la verdadera situación del Centro de Salud, y es que señala que desde el principio han estado pendientes de las repercusiones que tendría la supresión de un médico. “No hemos dejado de estar en contacto con los médicos, y su opinión es que con la receta electrónica se ha descargado el volumen de pacientes y no es necesario otro médico”. Si bien, ante las quejas vecinales la regidora ha insistido a la coordinadora del Centro de Salud sobre la situación del mismo y la respuesta es que se han reajustado consultas y ampliado horarios, y no hay listas de espera.

“Lo que nos dicen es que los médicos con más cartillas no tienen listas de espera, que sólo ocurre con una doctora porque estuvo tres días de curso. La verdad es que no puedo pronunciarme sobre este asunto. La primera que quiere que los ciudadanos tengan una atención de calidad soy yo, pero no se que pensar ante la diversidad de opiniones que me llegan, quizá habría que incidir en otros puntos como refuerzos para cubrir bajas, vacaciones, etc... pero es el Centro quien lo tiene que decir”.