acta sanitaria: El goteo de reacciones tras la dimisión este miércoles, 26 de noviembre, de Ana Mato como ministra de Sanidad no se ha hecho esperar y arroja un consenso generalizado en cuanto a la satisfacción reinante en el sector de la Sanidad española por el abandono del cargo de la persona que rigió los designios del mismo durante los últimos tres años.

Así, tras cesar como titular de la cartera sanitaria del Gobierno a causa de verse inmiscuida en la trama ‘Gürtel’ por el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, que en su auto declara que se lucró a través de “hechos delictivos”, Mato ve ahora cómo su gestión al frente de la misma dejó opiniones negativas por todos los frentes. Uno de ellos es el copado por la oposición, ya que el PSOE considera que los derechos de la ciudadanía y la sanidad pública “se quebraron” durante su gestión.

El PSOE solicita recuperar la sanidad pública

La secretaria de Sanidad de esta formación política, María José Sánchez Rubio, pidió al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ser “valiente” para restaurar estos aspectos, así como que “deje atrás la tijera” y “dé un giro” al escenario actual “de recortes y copagos”. En este sentido, reclamó trabajar “hacia la recuperación de un modelo de sanidad pública que, hasta la publicación del RD 16/2012, era un referente en Europa y en el mundo”.

En la misma línea se mostró la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), que sostuvo que, durante la permanencia del Mato en el Ministerio de Sanidad, “las cosas no han hecho más que empeorar”, destacando al Real Decreto mencionado anteriormente como “uno de los hitos más graves de su mandato”. La exministra dejó “abandonadas, sin asistencia sanitaria, a miles de personas”, lamentó.

Le achacan falta de diálogo con los profesionales y una nefasta gestión del ébola

La federación subrayó el saldo negativo de otros aspectos, como “la modificación del Estatuto Marco, la falta de comunicación con los profesionales del sistema y la nefasta gestión en la crisis del ébola”. A todo ello se une, según expuso, el hecho de haber “desmantelado” el Sistema Nacional de Salud (SNS).

Por su parte, el Centro Canario Nacionalista, por mediación de su secretario federal, Alfonso López, no se apartó de esta corriente de opinión al valorar “positivamente” la renuncia de Mato, ya que aseguró que dividió la sanidad “en financiada, de repago con aportación del usuario y exclusivamente de pago”. España “ha pasado con la exministra de ser un país puntero en servicios sanitarios a ser el cuarto por la cola en gasto sanitario público en la Unión Europea”, declaró.

La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) se refirió al futuro próximo al solicitar que la persona que sustituya a Mato “conozca el sector, y si es médico, mejor”. Además, se mostró a la espera de “que se continúe con el desarrollo de los acuerdos firmados con los médicos el 30 de julio de 2013, toda vez que fueron refrendados por el propio presidente del Gobierno”.

Metges de Catalunya

Por su parte, Metges de Catalunya celebra la dimisión de Ana Mato y lamenta la herencia que deja a su sucesor, caracterizada por la polémica reforma sanitaria aprobada a golpe de decreto, que excluye del sistema a los inmigrantes sin papeles, la retirada de la financiación pública de más de 400 fármacos de uso común y la nefasta gestión de la crisis del Ébola. En el ámbito profesional, MC censura también su “incapacidad y torpeza” para desbloquear el acuerdo firmado en la Moncloa con el Foro de la Profesión Médica a fin de conseguir un Pacto por la Sanidad que garantice la sostenibilidad del sistema sanitario público, así como la implicación de los profesionales en el proceso de reformas que requiere el modelo.

El sindicato espera que la persona que sustituya a Mato, además de desarrollar este acuerdo, tenga un mayor conocimiento del Sistema Nacional de Salud, mayor sensibilidad para los problemas de la profesión médica y más rigor en la toma de decisiones políticas.

Por su parte, los estudiantes de medicina manifiestan que el cambio de Ministro tiene que venir acompañado de una nueva filosofía de trabajo y de una nueva forma de relacionarse con el mundo médico y estudiantil por parte del Ministerio. Por ello, el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM) insta al futuro ministro a liderar un compromiso con la Profesión Médica y, en concreto, con los estudiantes.

“Consideramos que se han perdido valores imprescindibles en la Sanidad Española, como su universalidad, situación que es necesario que se revierta para plantearse empezar de nuevo el camino en la buena dirección.”, valora Juan Pablo Carrasco, Presidente del CEEM. A su vez, quieren aprovechar la oportunidad para impulsar el pacto por la Sanidad con la profesión Médica, del cual dudan su cumplimiento actualmente. Como punto fundamental del cambio, los estudiantes piden sentarse a hablar de las implicaciones reales de la Troncalidad, y no seguir apostando por la modificación radical del sistema actual de formación sin que exista un consenso mayoritario en el mundo médico y estudiantil, aún más teniendo en cuenta que dicho proyecto está pendiente de paralización por el Tribunal Supremo, señalan.