Cadena SER: “Nunca nos había pasado nada parecido”. Mari Carmen Gómez, la supervisora de Asistencias Los Ángeles de la Noche, todavía no da crédito a lo ocurrido. Pasaban unos minutos de las nueve de la noche del 24 de diciembre, el 061 derivó una llamada a esta empresa cordobesa de ambulancias, para que se encargaran de la atención de un vecino de la Avenida del Aeropuerto. El aviso era grave, se trataba de un infarto en un domicilio.
Al llegar a la vivienda, los sanitarios dejaron aparcada la UVI Móvil en la calle, con las llaves puestas y el motor encendido. Siempre lo hacen así, pues nunca se sabe la rapidez con la que hay que trasladar al enfermo. Subieron a casa del infartado e intentaron reanimarle durante 35 minutos. Desgraciadamente no hubo éxito.
Entonces bajaron y, tal y como nos cuenta Mari Carmen, “se encontraron con el sitio, la UVI no estaba”. “El técnico no se lo podía creer”, así que llamón a la Policía Nacional y aprovecharon que una patrulla de la Policía Local pasó por el lugar donde se encontraban para pedirles ayuda. Gracias al sistema de localización vía GPS con que cuentan estos vehículos sanitarios, el conductor logró localizar la ambulancia en el aparcamiento de un centro comercial que se encuentra junto al Barrio del Guadalquivir. Al llegar allí la encontraron con las luces puestas y las puertas abiertas. No habían robado nada, tampoco había destrozos en el vehículo, de hecho según el rastro dejado por el GPS, no excedieron los límites de velocidad, incluso se pararon en los semáforos que encontraron en rojo y fue un viaje directo: quienes robaron la ambulancia no la utilizaron para recorrer la ciudad sino que tomaron la Avenida del Aeropuerto, después cruzaron el Puente de Andalucía y aparcaron en el centro comercial. A esa hora, en plena nochebuena, ya no había nada abierto allí.