EL PAÍS: Renovar la tarjeta que da acceso a la sanidad pública en Cataluña costará siete euros a partir del 1 de marzo. La tasa se aplicará en todos los casos en que la renovación no sea un trámite ordenado por la Administración, como en caso de pérdida, robo o deterioro. Quien necesite renovar la tarjeta deberá dirigirse al centro de atención primaria correspondiente para iniciar los trámites. Los siete euros se pagarán en una entidad bancaria —La Caixa— y el justificante de pago deberá entregarse en el CAP, donde se entregará un documento provisional hasta que se reciba la tarjeta en el domicilio.
No deberán abonar la tasa las personas que cambien la tarjeta para rectificar el nombre, el sexo o la fecha de nacimiento. Salud informó ayer que “por cuestiones técnicas” las gestiones se deberán hacer de forma presencial, aunque en una fase posterior está previsto que la tramitación pueda realizarse a través de un formulario en la Red.
El año pasado se emitieron más de 677.000 tarjetas sanitarias. Según Salud, unas 400.000 se habrían visto afectadas por esta tasa. Si las cifras fuesen similares este año, los ingresos para Salud alcanzarían los 2,8 millones de euros. Salud defendió la tasa como forma de “contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario” y a la “calidad de las prestaciones y los servicios”. La medida está contenida en una disposición adicional de la ley de acompañamiento de los presupuestos aprobada por el Parlament en enero.