Las Noticias de Cuenca: La Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Cuenca y los sindicatos CCOO y UGT hacen especial hincapié en que no siempre es sencillo buscar un hospital que pueda atender a un enfermo en situación de urgencia con cama y profesionales operativos a pesar de que, por ejemplo para los casos de aneurisma, como el padecido recientemente por el vecino de Tianajas que acabó falleciendo, pueden servir tanto Toledo como Albacete, que disponen de servicio de Neurocirugía.

“Los médicos acostumbran a pelearse con los hospitales para que estos admitan al paciente porque los centros dicen que están saturados. Falta un protocolo que funcione para estos traslados, que los médicos no tengan que pelearse porque estas cosas hacen que se pierda un tiempo que muchas veces puede ser vital y que podría utilizarse para otras cosas”, señala Yolanda Miranzo, de CCOO.

Antiguamente, Rubén Paz, de UGT, recuerda que, ante situaciones de gravedad, se terminaba optando por montar al enfermo en una ambulancia y llevarlo a Madrid “al primer hospital que encontrabas, porque por teléfono siempre te daban problemas, diciéndote que lo llevaras a otro. Entonces lo dejabas allí y le decías a los familiares que, si no lo atendían, lo denunciaran”.

Un miembro de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública entiende que puede haber momentos puntuales en los que un determinado centro se colapse, pero en tal caso cree que los enfermos de gravedad no pueden esperar a que la situación mejore, sino que deberían ser atendidos en aquellos otros hospitales más próximos, sean de esta o de otra comunidad, “porque se entiende que la sanidad pública española nos unifica a todos por igual, que entre los españoles no debería haber diferencias por vivir en una región u otra”.

Esta persona hace especial hincapié en que “si se deriva a pacientes para intervenciones menores a Valencia o Madrid, lo que no deberían faltar son derivaciones en casos de necesidad urgente”.

“El problema es que para la privada lo rentable es hacer determinadas operaciones necesarias pero no urgentes, como poner válvulas, para lo que tienen una motivación económica, porque no sabemos ni cuánto les pagan por ello, pero a lo mejor no así tratar casos urgentes”, señala por su parte Paz.

“Tiene que negociarse la recepción de pacientes en fases digamos agudas”, dice un sindicalista que también advierte de la necesidad de dotar de más medios al Hospital conquense. “En cualquier libro que leo últimamente, recomiendan una unidad hemodinámica para cualquier patología coronaria tras realizarse el cateterismo. Aquí se quiso tener pero ahora parece imposible: me temo que en un Hospital pequeño como el que nos están dejando ya no lo vamos a tener nunca”.