Rastreadores públicos o privados: así contratan las comunidades autónomas a los "detectives" del covid

NIUS: El gobierno de la Comunidad de Madrid, liderado por la popular Isabel Díaz Ayuso ha contratado 22 rastreadores (20 auxiliares de enfermería y 2 médicos) adjudicados al grupo Quirón Salud por 194.223,15 euros para que durante tres meses realicen unas 190 pruebas diarias. El ejecutivo regional refuerza con un contrato privado un servicio de monitorización que el resto de las comunidades asume con medios públicos. Unas 20.000 personas contratadas por las administraciones siguen a diario el rastro de cada positivo en los 675 brotes activos registrados en España.Pero no todas ellas lo hacen con exclusividad. La recomendación de las autoridades sanitarias es que exista un rastreador cada 5.000 habitantes. Esta es la situación en los distintos territorios.


 

  • Madrid. Los 22 rastreadores 'privados' Quirón Salud se suman a los 400 profesionales con los que cuenta el sistema regional de sanidad pública. La Consejería de Sanidad busca, además, algún acuerdo con las mutuas para que su personal se sume a las labores de rastreo. Pese al refuerzo, la Comunidad de Madrid está a la cola en el ratio de rastreadores por habitantes, ya que cuenta con un rastreador por cada 15.000 habitantes. 
  • Cataluña. Cuenta con 1.556 profesionales dedicados al rastreo de casos, lo que representa un rastreador por cada 4.900 habitantes. La mayoría es personal de Salut Pública proveniente de Centros de Atención Primaria y de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica de Salut Pública (SUVEC). Otro grupo de profesionales, denominado Gestores COVID (1.196) opera desde call centers en Atención Primaria y Urgencias de distintos hospitales de la comunidad.
  • Aragón. Una de las comunidades autónomas más golpeadas por los rebrotes, cuenta con 260 rastreadores, uno por cada 5.000 habitantes. Se trata de personal sanitario de Atención Primaria, con apoyo de médicos y enfermeras jubilados. Entre los rastreadores hay también trabajadores sociales y agentes interculturales, encargados de hacer un seguimiento de los brotes entre colectivos inmigrantes, como los temporeros afectados en distintas explotaciones agrícolas de Huesca.
  • Comunidad Valenciana. Cuenta con 1.008 rastreadores, aunque el ejecutivo dirigido por Ximo Puig se ha comprometido a ampliar el equipo hasta los 1.210 profesionales. La Consellería de Sanidad ha acudido a la bolsa de trabajadores de técnicos en cuidados auxiliares y enfermería, enfermeras, auxiliares administrativos o celadores. La ratio de rastreadores por habitante se sitúa en uno por cada 4.900 habitantes, aunque mejorará con los 202 rastreadores que quedan por contratar.
  • Galicia. El Servicio Gallego de Salud de la Xuta dispone desde el mes de mayo de un servicio de rastreo, formado por profesionales del Sergas. El equipo comenzó a operar con 20 personas, aunque en este momento, la Xunta de Galicia asegura que hay hasta 6.000 profesionales encargados directa o indirectamente a monitorizar posibles rebrotes.
  • La Rioja. Sus 85 rastreadores pertenecen al sistema público de salud. No sólo se dedican al seguimiento de casos; también realizan pruebas PCR y lanzan mensajes de sensibilización a través de SMS. La ratio por habitante es de uno por cada 3.700.
  • Navarra. Tiene la peor ratio por habitante de toda España. Un rastreador por cada 17.200 habitantes. En la Comunidad Foral, hay 38 rastreadores pertenecientes al sistema público de salud Osasunbidea. El ejecutivo de María Chivite tiene una bolsa de otros 110 profesionales preparados para incorporarse al sistema de rastreo, si lo considera necesario.
  • País Vasco. Sus 180 rastreadores actuales -más una veintena de personal de apoyo- pertenecen al personal del servicio vasco de salud Osakidetza. El Departamento de Salud no se plantea por el momento ampliar equipos, aunque ha tenido que realizar alguna contratación externa, siempre de personal sanitario.
  • Cantabria. Roza el centenar de rastreadores, la mayoría se incorporó al servicio tras una formación que concluyó a finales de julio. Todos contratados desde la bolsa de empleo del Gobierno de Cantabria. Entre ellos hay médicos, enfermeras, además de veterinarios, farmacéuticos, psicólogos o trabajadores sociales. 
  • Extremadura. El Servicio Extremeño de Salud, a través de las 8 áreas sanitarias de la comunidad, aporta médicos, enfermeros, farmacéuticos e incluso veterinarios al equipo de hasta 320 profesionales encargados de hacer el rastreo de casos. Por cada 3.300 extremeños, hay un rastreador.
  • Región de Murcia. El personal de los centros de salud se encarga de los rastreos. Hay dos personas asignadas en cada uno de los 85 centros de salud de la Región para realizar labores de seguimiento, hasta un total de 170 personas. Junto a ellos, trabajan 45 personas del servicio de epidemiología, entre los que figuran algunos interinos contratados para reforzar el dispositivo. Sumados todos ellos, son unos 240 rastreadores, uno por cada 6.200 habitantes. Está previsto que a mediados de septiembre, 25 profesionales más se sumen a estas labores.
  • Andalucía. La Junta asegura que dispone de más de 8.000 personas encargadas del rastreo de casos, todas profesionales de enfermería y del servicio de vigilancia epidemiológica de salud pública. Es un vigilante por cada 1.000 habitantes. No se dedican en exclusiva al rastreo, sino que compatibilizan sus funciones habituales con la monitorización de casos. En este momento, hay 1.600 personas en formación en la Escuela Andaluza de Salud Pública que podrían incorporarse a estas labores.
  • Asturias. Cuenta con 94 profesionales sanitarios: médicos y enfermeras, con apoyo de trabajadores sociales, que trabajan en coordinación con los centros de salud.
  • Baleares. En este momento cuenta con 162 rastreadores, (todos enfermeras y auxiliares de enfermería, contratados por el Gobierno Balear), aunque el objetivo del gobierno de Francina Armengol es triplicar esta cifra con nuevas contrataciones. El trabajo se coordina desde una central Covid, con el apoyo de los centros de atención primaria. La ratio es de un rastreador por cada 7.100 habitantes.
  • Canarias. La consejería de Sanidad canaria aplica un sistema propio de seguimiento de casos. No dispone de un equipo de rastreadores propiamente dicho. Son los médicos y enfermeros de los centros de Atención Primaria (unos 5.000 profesionales en el archipiélago) los encargados de localizar los nuevos casos. Se apoyan en 15 profesionales de Salud Pública y en los equipos de coordinación covid desplegados en casa una de las siete islas.
  • Castilla-La Mancha. 427 'detectives' del covid se encargan de monitorizar los contagios en la región. Son uno por cada 4.700 habitantes. Se trata de personal sanitario y de los servicios regionales de epidemiología. La Junta prepara también un equipo de profesionales telefónicos que trabajará desde un call center para hacer un rastreo de posibles casos positivos.
  • Castilla y León. Supera los 600 rastreadores, uno por cada 4.000 habitantes. Todos han sido contratados en la bolsa de trabajo de la Junta. Su número oscila entre los 114 disponibles en la provincia de Burgos y los 40 de Soria o Segovia.


 

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