Extraídas de El Digital de Castilla La Mancha, noticias interesantes sobre la salud de la sanidad de Castilla La Mancha.
Un patatús. Esto de la privatización de la salud nos va a costar un telele. O un soponcio, que no es moco de pavo que los mercados, ese puñado de tunantes, nos utilicen como sujetos de pruebas para sus avariciosos experimentos.
El síntoma definitivo de un capitalismo enfermo es el trapicheo sanitario. Parece que hayamos caído en manos de científicos locos que disfrutaran hurgando con tenedores en nuestros agujeritos. Somos ratas de laboratorio prisioneras de un profesor Bacterio financiero. Malditos roedores atrapados en una pesadilla biológica. Cobayas para un doctor Frankenstein que sopesara cuánto vale un paciente, cómo cotizará un duodeno, cuál será la prima de riesgo del corazón o qué solvencia tendrá un riñón.
Los mercados revisan la calificación del cuerpo humano, convertido en moneda y descuartizado en divisas. O quizá peor: rebajado a bono basura. Sube la bilirrubina sólo de pensarlo. Nos quieren ligar las trompas bajo la estafa de la asepsia. No te dolerá, dicen, aunque de nada te valdrá tener un corazón de oro si no puedes venderlo. Mejor tener una salud de hierro, que la ferralla se compra al alza.
En este contexto, el Gobierno de Castilla-La Mancha ensaya con la "gestión público-privada" de la Sanidad sin que haya explicado claramente en qué consiste; y por ello no debe extrañarse ante la alarma generada entre los ciudadanos de Almansa, Villarrobledo, Tomelloso y Manzanares, cuyos hospitales serán los conejillos pioneros de esta investigación.
Quiera el destino que la experiencia sea positiva. Doctores tiene la Iglesia, y quizá les asista la razón. Pero la incertidumbre planea sobre las gentes sencillas. ¿Cuánto ahorrará la Junta de Comunidades destinando el presupuesto de un hospital público a una concesionaria privada? El usuario seguirá sin pagar pero... Si el ratio gasto-paciente se quedara corto, o si la subcontratista fuera penalizada por merma en la calidad de servicio, ¿cuál será la praxis de una empresa que naturalmente husmeará el beneficio? ¿Se producirá la muerte por inanición de estos hospitales si los pacientes migraran a otros centros públicos o privados?
Acertijos en la oscuridad. Mientras tanto, confiemos en que nuestros próceres desenreden la marimorena, no vaya a ser que la sanidad gratuita, universal y de calidad sólo llegue con el Fin de los Tiempos y la resurrección de la carne. Y quizá ni por esas: dicen que se subastan las puertas de San Pedro. Cuestión de reducción del déficit.
El Sescam sale al paso de las graves acusaciones en Ciudad Real
El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha ha asegurado que la dotación de personal y de medios en el hospital de Ciudad Real está adecuada a las necesidades asistenciales para dar una buena atención a los pacientes, haciendo un seguimiento continuo y pormenorizado de la situación diariamente, contando siempre con la opinión de los responsables asistenciales de todos los servicios implicados".
De este modo, la Gerencia de este centro sale al paso de la denuncia formulada por los sindicatos con representación en este centro, que han denunciado la reducción en la plantilla de personal y del número de camas en este centro.
Según el Sescam, el número de pacientes pendientes de ingreso en el Servicio de Urgencias del Hospital General de Ciudad Real en la tarde de este, lunes, 23 de enero, era de cinco usuarios sin habitación asignada, una cifra muy buena para cualquier hospital del tamaño y población de referencia del HGCR en estas fechas del año.
De esos pacientes, ninguno alcanzaba 15 horas con ingreso solicitado. Los usuarios han ido ocupando sus respectivas habitaciones conforme su estado evolutivo lo permitía.
Aseguran que el Servicio de Urgencias de este hospital está estructurado en diversas áreas de atención, de menor a mayor gravedad, contando con un total de 34 camas para la observación y estabilización de los enfermos. La plantilla de personal sanitario de Urgencias no sólo no se ha visto recortada, sino que se ha reforzado en momentos puntuales de mayor presión asistencial.
"Como cada año en estas fechas, hay una mayor afluencia de los pacientes a los servicios de urgencias que puntualmente producen mayores cargas de trabajo, para lo cual el HGCR hace años viene respondiendo para dar una buena cobertura a estas necesidades", han defendido.
Dicho esto, desde la Gerencia de este centro han vuelto a pedir a los ciudadanos que "hagan un buen uso de las urgencias hospitalarias y del resto de los recursos asistenciales del Sescam, como son los centros de salud y los puntos de atención continuada de Atención Primaria, dispositivos que están muy bien preparados para dar una respuesta óptima a la gran mayoría de necesidades de atención".