Redacción Médica: El Pacte Nacional de Salut de Cataluña, la hoja de ruta de la transformación del modelo sanitario catalán, se acerca a su culminación. Esta iniciativa, fruto del compromiso del exconseller de Salut Manel Balcells para blindar y transformar el sistema de salud desde el punto de vista de financiación y de modelo, y para abordar los retos de presente y futuro, quedó en punto muerto tras las elecciones autonómicas del pasado 12 de mayo. Ahora, el nuevo Govern de la Generalitat de Salvador Illa y la consellera de Salut, Olga Pané, deberán terminar el texto definitivo, tras recabar recientemente la participación de la ciudadanía.
El principal proyecto sanitario de la anterior legislatura, cuya intención era disponer del texto definitivo en junio si no se hubieran convocado comicios, será retomado por Pané. Entre las conclusiones del 'Informe de Resultats de la participación ciutadana sobre el Pacte Nacional de Salut', con fecha de julio, la medida esencial es la valoración del grado de acuerdo e importancia respecto a las acciones recomendadas por los expertos. Esta se sitúa entre las puntuaciones de respuesta de 'muy de acuerdo' o 'bastante de acuerdo' y 'muy relevante' y 'bastante relevante'.
El documento de bases fue elaborado a partir del trabajo con 54 expertos en las diferentes materias que abastecen las áreas de transformación del sistema de salud. El Pacte Nacional de Salut, en el que participaron miembros del Govern, entidades ciudadanas, grupos parlamentarios, organizaciones sanitarias, corporaciones profesionales, sindicatos, sociedades del conocimiento y entidades municipalistas, se presentó el pasado enero con 13 retos y 67 acciones recomendadas.
Por lo que respecta a la ciudadanía a nivel individual, las ocho de las diez acciones más destacadas y que son coincidentes hacen referencia a potenciar Atención Primaria y Comunitaria e incrementar su accesibilidad y capacidad resolutiva. También la visión de la salud a lo largo de la vida, la coordinación de esfuerzos para la mejora de la salud, la garantía de recursos, la promoción de la salud comunitaria a escala local, la aceleración de la planificación de necesidades futuras de los diferentes perfiles profesionales de la salud y la anticipación de acciones adecuadas para cubrirlos.
Por el contrario, las otras dos de las diez acciones que se identifican en la lista de las diez de más acuerdo y que no figuran entre las más importantes se corresponden al desarrollo de herramientas para identificar necesidades y demandas ciudadanas, y a fortalecer la participación profesional y ciudadana.
En cuanto a las entidades y colectivos, se observa que comparando las acciones con mayor grado de acuerdo y más relevancia, ocho de las diez acciones son coincidentes en ambas listas. Como novedad respecto a las anteriores en esta clasificación aparecen tareas como coordinar esfuerzos para la mejora de la salud, fortalecer la participación profesional y ciudadana y garantizar y optimizar los recursos. Y entre las que generaban más consenso, pero no se sitúan entre las más importantes, la de acelerar la planificación de las necesidades futuras de diferentes perfiles de profesionales de la salud y anticipar las acciones adecuadas para cubrirlas, y la armonización de condiciones laborales.
En este proceso de participación ciudadana se abrió un cuestionario telemático en el que han participado 839 personas a título individual y 84 entidades o colectivos entre el 23 de enero y el 23 de febrero de este año.
En el proceso participativo se ha identificado una nueva temática, la atención a la salud en catalán, que no se trataba en el documento de bases. Este ámbito ha recogido un 4,17 por ciento de las aportaciones de entidades y un 4,12 por ciento de la ciudadanía a título individual.
Por otra parte, en algunos núcleos de interés se ha recogido cierta polarización y divergencia de opiniones y visiones. Este hecho se da especialmente en la financiación del sistema de salud, el modelo de sistema sanitario en relación con el principio de universalidad o su naturaleza, estructura y gobernanza. Con todo ello, a instancias del Consell de Salut de Catalunya, será el Govern del PSC el que previsiblemente culminará el Pacte Nacional de Salut.