Cadena SER: Cuando uno llega a la calle Cabo San Vicente 14 de Alcorcón, lo primero que se encuentra es un cartel donde se puede leer ‘Centro de Salud los Castillos’. Nada más atravesar la puerta la realidad es otra. No parece un centro médico. No hay ajetreo. La sala de espera está vacía. Apenas hay pacientes. Y aunque se pueden ver varias puertas cerradas, solo hay dos consultas operativas. En una de ellas recibe a sus pacientes una doctora, en la sala contigua les atienda una enfermera. Pero en ocasiones hay días en los que la doctora, si está de baja, ni siquiera se cubre su ausencia, en esos días, directamente, no hay consulta médica.
Así es este centro de salud de Alcorcón. De las paredes vetustas cuelgan carteles muy antiguos donde se recuerda que está prohibido fumar, las puertas también son muy viejas, incluso a través de los cristales de las ventanas aún se pueden ver las pegatinas del antiguo logo del INSALUD. Pisar este Centro de Salud es un viaje al pasado, al siglo XX. Lo que nadie imagina es qué hay detrás de las dos puertas donde se puede leer ‘no pasar, privado’.
Otra de las consultas del CS de los Castillos / Javier Bañuelos
Si uno las abre, descubre un auténtico centro de salud fantasma de 900 metros cuadrados. Hay una veintena de salas de consultas completamente desmanteladas, vacías, inutilizadas y en ocasiones destrozadas. En algunos casos, ni siquiera se han molestado en quitar el cartel del último pediatra que pasaba las consultas por las tardes. Ahora, esa sala está completamente vacía, llena de taquillas sin utilizar. Otras consultas tienen las paredes desconchadas por culpa de la humedad. Las cajas se amontonan por el suelo. Hay espejos arrancados. Muebles amontonados. Y lavabos tirados por el suelo.
Antigua consulta de pediatría del CS de los Castillos / Javier Bañuelos
Por este local, desde 2007, cada año, la Consejería de Sanidad paga un alquiler de 100.000 euros por usar esas instalaciones. Lo paradójico es que a solo 650 metros de allí se encuentra el nuevo Centro de Salud de los Castillos, un edificio moderno que inauguró Esperanza Aguirre en 2007, con una capacidad para atender 30.000 pacientes.
Contrado firmado en 1977 con la dueña del local de la calle Cabo San Vicente 14 de Alcorcón / Cadena SER
El local en el que el se instaló el antiguo Centro de Salud de los Castillos no pertenece a la Administración. En 1977, el Instituto Nacional de Provisión firmó un contrato de alquiler (ver foto) con la dueña de ese local, Matilde Vidal Francés. En aquel año acordaron un pago anual de 2.036.130 pesetas, importe que tendría que ser revisado cada dos años, según se pactó.
Durante los últimos 12 años, la Comunidad de Madrid ha estado pagando cerca de 1.2 millones de euros por el alquiler de un centro médico antiguo teniendo otro, moderno, a solo unos metros. En los primeros años, la Consejería de Sanidad decidió mantener abiertos los dos para que hubiese una transición cómoda para los vecinos de este barrio que estaban acostumbrados a su centro de salud de toda la vida. Pero esa criterio se ha eternizado año tras año.
La Cadena SER se ha puesto en contacto con la Consejería de Sanidad, admiten que están estudiando la relación coste-efectividad de este centro de salud para decidir qué hacen con él.