nuevatribuna.es: CCOO de Madrid denuncia que el Gobierno de Isabel Díaz-Ayuso cerrará 2.000 camas hospitalarias este verano pese a que la lista de espera quirúrgica supera los 90.000 pacientes. 21 hospitales madrileños, más de la mitad de los hospitales públicos del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), ya tienen la aprobación del Gobierno regional para proceder al cierre de, al menos, 2.141 camas en sus centros durante el período que va del 1 de julio hasta el 1 de octubre.

Los cierres se producirán a pesar de que continúan los ingresos por COVID en hospitalización y también en las unidades de críticos, y de que los ingresos por diversas patologías no COVID son mayores que otros años, por ejemplo, las bronquiolitis infantiles.

Según los datos del Registro Unificado de Lista de Espera Quirúrgica de la Comunidad de Madrid, en mayo 2021 el número total de pacientes en lista de espera era de 90.978, 12.807 más que antes de la pandemia. En febrero de 2020, el número de pacientes que esperaban una intervención quirúrgica era 78.171.

Con estos datos, la demora estructural ha pasado de ser de un 47,02 por ciento a incrementarse hasta un 76,68 por ciento, “una situación insostenible para el buen funcionamiento de la sanidad pública madrileña”, a juicio de CCOO.

El sindicato reclama al Ejecutivo madrileño que incremente las contrataciones y que mantenga funcionando las camas hospitalarias al 100% este verano, con el fin de agilizar la reducción de las listas de espera en el área quirúrgica, en las pruebas diagnósticas, y para salir de las demoras interminables que se han incrementado con motivo del último año de pandemia.

Madrid ocupa el sexto lugar en el ranking de comunidades autónomas con mayor número de tiempo de espera para ser atendido en la mayoría de las distintas cirugías que ofrece la sanidad pública.

Por ello, CCOO pide al Gobierno regional que evite un cierre de camas y quirófanos como en años anteriores, porque también le preocupa el incremento de pacientes ingresados en hospitales que provocan las olas de calor, la subida de ingresos de menores y lactantes por el incremento sustantivo de las bronquiolitis, que se están produciendo fuera de su ciclo estacional y de las cuales los hospitales tienen registros similares a los del primer trimestre del año en prepandemia.