infoLibre: Una veintena de trabajadores del Hospital Carlos III ha aprovechado este viernes la visita del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para demostrar su apoyo a la auxiliar enferma, Teresa Romero, cubriéndose la cara o tocándose el rostro con un guante. Algunos de ellos le han lanzado guantes de látex.
Coreando "¡Todos con Teresa!", sus compañeros han querido mostrar así su indignación con las palabras del consejero de Sanidad madrileño, Javier Rodríguez, que acusó a la enferma de haber ocultado datos vitales a los médicos que le atendieron en un primer momento aunque posteriormente matizó sus palabras.
Los trabajadores han intentado que el presidente viera las protestas pero el equipo de seguridad les ha limitado la zona en la que podían concentrarse.
Mariano Rajoy, en su visita al hospital, ha insistido en que el riesgo de que la enfermedad del ébola se pueda propagar en un futuro es "muy bajo", según le han transmitido tanto la Comisión Europea como la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Tanto la Comisión Europea como la Organización Mundial de la Salud dicen que es muy bajo el riesgo de que esta enfermedad se pueda propagar en el futuro", ha señalado Rajoy, queriendo enviar "este mensaje a los españoles" de parte de los expertos.
Estas declaraciones las ha hecho tras visitar junto con el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, a Teresa Romero, la auxiliar de enfermería ingresada en el Hospital Carlos III de Madrid por estar contagiada del virus.
La prioridad, ha dicho, es Teresa Romero, la "única persona que sepamos que está enferma" mientras que el siguiente objetivo es "vigilar" la situación de los otros pacientes que están en observación.