Redacción Médica: La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha este martes el nuevo modelo asistencial en Atención Primaria para aumentar las consultas presenciales ante la mejoría de la situación epidemiológica y el avance en la vacunación contra el Covid-19. En este sentido, la Gerencia Asistencial de Atención Primaria remitió la semana pasada a los 266 centros de salud de la región un plan con medidas para mejorar la accesibilidad a estos dispositivos.
De acuerdo con esta planificación, a partir de hoy
se retirarán los puntos externos de control situados en la puerta de acceso de los centros de salud, que se instalaron al inicio de la pandemia para reducir los riesgos de transmisión del coronavirus. En su lugar, se habilita un punto interno de ordenación de flujos, para garantizar un circuito de entrada del paciente con síntomas de Covid-19, que evite el contacto con otros usuarios y garantice las debidas medidas de protección.
Siguiendo el calendario del plan de accesibilidad de la Gerencia Asistencial de Atención Primaria, desde el próximo martes, 8 de junio, los profesionales irán incrementando la disponibilidad de cita para la consulta presencial que, progresivamente, alcanzará el 60 por ciento de su actividad asistencial a mediados del mes de junio.
Atención Primaria intensifica la atención presencial
Ante la nueva situación epidemiológica,
Atención Primaria considera que se puede intensificar la recuperación de la atención presencial de aquellos enfermos crónicos y pacientes con enfermedades no Covid, así como incrementar las actuaciones de prevención y promoción de la salud, habituales en esta asistencia sanitaria. Para alcanzar estos objetivos, se revisará la situación de cada centro, a través de sus Direcciones Asistenciales. La configuración de las agendas de los profesionales permitirá que los usuarios se puedan citar a través de los sistemas alternativos de cita (cita online, APP...).
La Gerencia Asistencial de Atención Primaria recuerda que las sucesivas ondas epidémicas causadas por el coronavirus obligaron a una reorganización de la actividad asistencial para minimizar la transmisión del Covid-19 tanto entre los profesionales como los usuarios.