PÚBLICO: Asociaciones científicas y de sanitarios han presentado un plan alternativo de vacunación al de la Comunidad de Madrid. El objetivo de esta iniciativa es poner la Atención Primaria en el centro de la estrategia, en contraste de lo que ha organizado la Consejería de Sanidad del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. Los sanitarios reprueban que se hayan centralizado las inoculaciones a varios grupos en espacios como el estadio Wanda Metropolitano, el hospital Isabel Zendal o, a partir del viernes, en el WiZink Center. Las críticas van por dos lados: por las dificultades que está sufriendo la población para acceder a estos espacios y por el abandono de lo público en sustitución de espacios privados.
La propuesta se ha lanzado con el ayuntamiento de Getafe, el sitio en el que se ha presentado. El plan se aplicar en toda la región aunque se ha hecho un "plan operativo" basándose en los datos de esta ciudad y definiéndolo con los recursos disponibles. El objetivo es que la vacunación se haga en los centros de Atención Primaria y, si hiciera falta, en espacios públicos cercanos a los centros para mejorar la gestión como pueden ser centros de mayores, cívicos, colegios en horario no lectivo, bibliotecas, centros municipales de salud o polideportivos. El objetivo de todo esto es que las personas no se vean afectadas por desplazamientos que pueden llegar a superar la hora. Por ejemplo, desde Getafe centro hasta el hospital Isabel Zendal se tarda en transporte público entre una hora y una hora y media de ida y otra de vuelta. Es decir, una persona tendría que dedicar entre dos horas y tres horas para llegar al punto de vacunación, más el tiempo que pase en el centro. Durante la última semana se han visto largas colas tanto en el Wanda como en el Zendal.
Aunque el principal problema no es el tiempo como tal. Más allá de eso es que hay personas citadas para ir al Zendal que tienen problemas de movilidad. Una conversación desvelada este martes mostraba esta problemática: una señora de Colmenar de Oreja, recién operada de un pie, fue citada en el hospital de emergencias. Pero no podía recorrer 65 kilómetros en transporte público para recibir el pinchazo así que no se pudo vacunar porque la Administración no puso ninguna solución. Algo que no hubiera pasado si la vacunaran en el pueblo en el que reside.
Alberto pudo ir al Zendal a recibir la vacuna porque una familiar le pudo llevar en coche a última hora
Alberto, por ejemplo, pudo acudir al Zendal desde Morata de Tajuña porque a una de las hijas de su prima le dieron permiso en el trabajo para llevarle en coche. Es viudo, sufre de artitris y tiene problemas de visión. Si no hubiera sido por esta familiar, también habría perdido una oportunidad de inmunizarse contra la covid. Pero igualmente la familia vivió momentos de alta tensión porque Alberto deseaba recibir el pinchazo "de la vacuna que fuera". "Yo pedí permiso en el bar en el que trabajo para llevarle pero no me lo dieron. No tenemos mucha familia y al final conseguimos encontrar la forma casi a última hora", explica a Público su hija.
Por esto las enfermeras defienden otra planificación. "Siempre pensando en la necesidad de vacunar al máximo número de personas posibles, hay que acercar las estructuras a la población", explican en el documento firmando por la Asociación Madrileña de Enfermería (AME), la Plataforma Centros de Salud de Madrid, la Asociación Madrileña de Salud Pública (AMaSaP) y la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (Afem).
Por otro lado, la propuesta contempla un incremento de las horas que se está dedicando a la inmunización. Para ello se plantean que se amplíen los horarios de vacunación y que se abran los centros de salud durante los fines de semana durante 12 horas. Hasta este miércoles el Gobierno de Ayuso no había anunciado que se empezaría a inocular durante los sábado y domingo pero hasta el pasado fin de semana no se han aprovechado al 100%. El cierre de los centros durante los festivos de Semana Santa y el parón de la inmunización a mayores de 80 años, pese a que la Comunidad de Madrid contaba con dosis, fue muy polémico y criticado por los sanitarios.
La nueva idea de utilizar diez hospitales de la región como apoyo para vacunar tampoco convence a los sanitarios. "Los hospitales tienen que afrontar largas listas de espera. Tienen mucho trabajo con la pandemia. Se puede hacer de otra forma", defiende la presidenta de AME, Alda Recas. Hay más problemas con este plan porque el Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha denunciado que se ha dejado fuera al Hospital Universitario Príncipe de Asturias por lo que toda la población del Corredor del Henares tendrá que desplazarse hasta el Wanda o el Zendal. Además, los hospitales de la Comunidad de Madrid vuelven a tener que afrontar un incremento de ingresos hospitalarios por la llegada de la cuarta ola. Según los datos de Sanidad del miércoles, un 38% de las camas de UCI y un 14% de las hospitalarias ya están ocupadas por pacientes con covid-19.
Además, los sanitarios defienden que las enfermeras de los centros de salud de la población pueden ser los que mejor resuelvan las dudas de las personas. Tras los últimos cambios con la estrategia sobre AstraZeneca ha crecido la inseguridad entre algunas personas y desde Atención Primaria se sostiene que son los trabajadores conocidos y cercanos los que mejor pueden atender las inquietudes que tenga cada citado.
Pero, además, los sanitarios también plantean que se duplique el tiempo destinado a vacunar pasando de 4 horas a 10 horas. "Esto supondría un incremento de 36 horas, para un solo equipo, por lo que habría que multiplicar esta cifra por el número de equipos que se implantaran, según las necesidades", explican. Aunque para esto es necesario contratar más enfermeras y una ampliación horaria voluntaria para las plantillas de los centros de salud así como recurrir a convenios de colaboración, por ejemplo, con ayuntamientos para contar con enfermeras escolares, personal sanitarios o más administrativos.
Aunque tampoco han olvidado destacar durante la presentación aspectos que hasta ahora están generando problemas como la necesidad de contar un protocolo que establezca qué hacer con las vacunas que sobren para que no se pierdan dosis y facilitar el acceso a las vacunas a la población más vulnerable teniendo en cuenta a los mayores sin apoyo pero también a las personas sin tarjeta sanitaria o personas sin hogar.
Los portavoces también han criticado la "improvisación" del Gobierno autonómico en todo lo relativo a la vacunación. Desde el primer momento en el que se enteraron que empezaba la inmunización a mayores de 80 años el día antes a enterarse por notas de prensa que no se iba a inocular en los centros de salud durante la Semana Santa. "Desde el principio se ha apostado por alquilar un Wanda o Wizink Center. Hasta ayer no llegaron los listados para ampliar turnos pero no sabemos la organización ni cuánto se va a remunerar por las horas extra para vacunar", explicó en rueda de prensa Mar Noguerol, una de las sanitarias que ha participado en el desarrollo del plan.