En la práctica, este copago, también llamado "repago", supone cobrar hasta 4,26 euros por medicamento a los enfermos que necesitan alguno de los 43 tipos de fármacos incluidos en la medida, entre los que figuran los más avanzados para retrasar la progresión del cáncer de mama, las quimioterapias orales y tratamientos para la artritis, hepatitis, esclerosis múltiple y fertilidad.
Las Comunidades argumentaron primero problemas técnicos para no implantarlo, por lo que Sanidad permitió retrasar su aplicación tres meses, hasta el 1 de enero. Ahora, la mayoría de las Consejerías admiten que están preparadas técnicamente para aplicar la medida, pero ninguna lo hace. ¿Por qué?
Cada Comunidad da unas razones: las de Gobiernos socialistas, como Andalucía y Asturias, han presentado recursos y aseguran que sólo lo aplicarán "por encima" de su "cadáver"; otras, como Cataluña, Navarra, Canarias o Castilla y León (esta última del PP) también han recurrido la medida. Y la mayoría asegura que el copago no es una medida prioritaria, que sólo la aplicarán cuando todas las demás lo hagan y que no repercutirán el cobro a los enfermos.
SANIDAD: "ES OBLIGATORIO"
En resumen, las Comunidades se han subido a las barbas del Ministerio, que en conversación con El Huffington Post admite las dificultades para aplicar el copago porque nadie está cumpliendo.
"El Ministerio ni ha paralizado ni ha suspendido la medida, así que está en vigor. Eso quiere decir que las Comunidades deben aplicarla desde el 1 de enero. Es obligatorio", subrayan fuentes del departamento que dirige Ana Mato.
Esas mismas fuentes prefieren no detallar las consecuencias que puede tener para los Gobiernos autonómicos el incumplimiento. "Reiteramos que se debe cumplir, pero tampoco podemos decir: 'Ojo, porque si no cumples te va a pasar esto o te va a pasar lo otro".