Redacción Médica: La satisfacción de la ciudadanía española respecto al funcionamiento del sistema sanitario público alcanzó su registro más alto de la pasada década en 2019, año en el que se basa el último Barómetro Sanitario. La puntuación que le otorgaron los encuestados fue alta (6,74), pero sigue sin llegar al “notable”, algo que sí ocurre en la valoración de la Atención Primaria y el Ingreso Hospitalario.
Según la encuesta que publica el Ministerio de Sanidad, basada en 7.665 entrevistas, la satisfacción de los españoles en torno al sistema sanitario se ha mantenido estable a lo largo de los últimos años. En 2019 se alcanzó un ‘pico’ de 6,74 sobre 10, la puntuación más alta desde 2009. En este lapso de tiempo, la calificación más baja fue el 6,31 de 2014.
Para el 72,1 por ciento de los consultados, el sistema sanitario “funciona bastante bien”, aunque dos de cada tres afirman que “necesita cambios fundamentales”. Solo el 4,1 por ciento afirmó que “habría que rehacerlo”. De hecho, la valoración del sistema en Epaña se encuentra en niveles más altos que los de países como Australia, Estados Unidos, Reino Unido, Suiza o Noruega.
La percepción de los españoles no es la misma en todos los servicios sanitarios públicos. El mejor valorado es la Atención Primaria, al que los encuestados puntuaron con un 7,29 sobre 10. También alcanza el “notable” el tratamiento del Ingreso Hospitalario (7,13). Por debajo se encuentran las consultas con Especialistas (6,83) y el servicio de Urgencias (6,06).
También se encuentra en valores muy altos la confianza de los pacientes hacia el médico y el personal de enfermería. En el primero de los casos, la nota es del 7,84, mientras que la seguridad de los enfermeros se puntuó con un 7,79. También fueron muy bien valorados la atención y los cuidados que recibieron de ambos grupos de profesionales (entre el 7,78 de los médicos y el 7,77 de los enfermeros). La peor nota en este apartado se la llevó el tiempo dedicado a cada paciente, aunque esta sigue siendo alta (7,29).
La encuesta abordó también las preferencias acerca de la naturaleza del servicio sanitario. Al respecto, casi siete de cada diez consultados afirmaron que, si pudieran elegir, optarían por hospitales o servicios de urgencias públicos.