Redacción Médica: Las regiones apuestan por la sanidad en sus presupuestos. Con una subida generalizada del gasto sanitario, las 14 comunidades que han presentado sus presupuestos suman un total de 74.231,9 millones de euros para atender los servicios de salud.

A la cabeza de gasto en sanidad se sitúa Andalucía, con un presupuesto total de 12.900,5 millones de euros, lo que suponen el 28,9 por ciento del total del Presupuesto de 2022 de la región.

En segunda posición se sitúa Cataluña, que destinará 11.171 millones de euros al gasto sanitario, 1.456 millones de euros más que el presupuesto de 2021. El plan presupuestario catalán se asienta en un mayor esfuerzo inversor y una dotación extraordinaria de 500 millones de euros para seguir haciendo frente a los gastos sanitarios derivados de la pandemia en ausencia de un nuevo fondo Covid-19, así como una política de contratación donde prevé sumar 17.663 plazas.

Por debajo de los 10.000 millones de euros se encuentra la Comunidad de Madrid, cuyos presupuestos plantean un gasto de 8.073 millones de euros en sanidad. Le siguen la Comunidad Valenciana con un presupuesto sanitario de 7.837,7 millones de euros. repitiendo como el gasto social con más presupuesto.

En la parte media de la tabla de partidas se encuentra Galicia con 4.589 millones de euros para Sanidad y el País Vasco, cuyo presupuesto de salud se sitúa en los 4.352 millones de euros. De cerca se sitúa el presupuesto de Castilla y León, con 4.448 millones de euros.

El Gobierno de Castilla-La Mancha también sitúa el gasto sanitario entre las prioridades para 2022, con un presupuesto de 3.665,4 millones de euros. Cifra similar que destinarán las Islas Canarias, cuyo ejecutivo ha presentado la propuesta de ley de presupuestos con una dotación de 3.461 millones de euros para sanidad. 
 

En cuanto a las Islas Baleares, la presidenta del Govern, Francina Armengol, ha afirmado que los 2.010 millones de euros suponen el “presupuesto más alto de la historia”, sumando hasta 110 millones más que en 2021. Por su parte, el Gobierno de Aragón plantea una reducción de su dotación para sanidad, situando su presupuesto en 2.242 millones de euros. 

En línea con su población, Extremadura contempla un gasto sanitario enfocado en la formación y las nuevas infraestructuras, con 2.000,8 millones destinados a cubrir las políticas sociales sanitarias, 132 millones más que el año pasado.

En el entorno de los 1.000 millones se sitúan Navarra, con un presupuesto sanitario de 1.260 millones de euros, y Cantabria, con 1.028  millones de euros destinados a salud. La región que menor presupuesto destina a sanidad sería La Rioja, cuyos presupuestos contemplan 552 millones de euros, aun así se trata de supone el 30 por ciento de la dotación total de la región.

Las últimas regiones en presentar sus presupuestos han sido Murcia y el Principado de Asturias, que han dado a conocer sus partidas presupuestarias en diciembre. En el caso de la Región de Murcia, tras la moción de censura , espera aprobar de forma definitiva su propuesta el mes de enero, la cual recoge una dotación de 2.167 millones de euros para la partida sanitaria. 

Finalmente, el Principado de Asturias, ha aprobado sus cuentas generales para 2022 con una política basada en el refuerzo a la Atención Primaria. En concreto, el Gobierno asturiano destinará a Sanidad 1.958 millones de euros, donde se sitúa la partida de 322,6 millones para fortalecer la presencialidad en los centros sanitarios. 
 

Aumento generalizado

En líneas generales, todas las comunidades autónomas han incrementado sus presupuestos destinados a sanidad respecto al ejercicio de 2021. Unas dotaciones económicas que buscan dar respuesta a las necesidades creadas tras la pandemia.

Así, destaca como de forma mayoritaria, las regiones han aumentado las cantidades dirigidas a los capítulos de gasto de personal, con vistas a incrementar las plantillas sanitarias. Es por ello que en muchas de las propuestas aparecen reflejados los denominados fondos covid, aunque el Gobierno central todavía no ha aclarado si se distribuirán estos fondos entre las regiones. Los ejecutivos autonómicos sin embargo han creado sus cuentas contando con estas partidas, destinadas fundamentalmente al mantenimiento del personal contratado durante la crisis del coronavirus.