EL PAÍS: El sector de las ambulancias en Bizkaia no tiene tregua. Un total de 30 ambulancias de la empresa Ambuibérica han resultado calcinadas y otras cinco afectadas en un incendio provocado en un pabellón de Arrigorriaga, Bizkaia, después de que el pasado jueves se produjera un ataque en la base de Ambulancias Bizkaia, en Zorroza, donde pincharon las ruedas de en torno a 90 vehículos.

La Ertzaintza investiga cómo se ha producido el incendio en el pabellón de Arrigorriaga y si como parece se trata de un sabotaje enmarcado en varios conflictos, incluido uno laboral en Ambulancias Bizkaia, que afectan a ambas empresas. Esta última dejará de prestar servicio a la Sanidad pública vasca, en Bizkaia, este domingo, tras más de dos décadas, al haberse hecho Ambuibérica con el contrato. El fuego se ha iniciado poco antes de las cinco de la madrugada en un pabellón del polígono Atxukarro de Arrigorriaga, donde permanecían estacionadas 180 ambulancias. Como consecuencia de incendio han resultado dañados 35 vehículos.

El pasado jueves 10 de mayo casi un centenar de ambulancias de la otra compañía amanecieron con las ruedas pinchadas en el barrio bilbaíno de Zorroza, donde Ambulancias Bizkaia tiene su base. Los vehículos se encargan del traslado de enfermos que regresan a casa desde los hospitales de Bizkaia o que tienen que ir a rehabilitación, por ejemplo. Ese hecho provocó numerosos retrasos en la prestación del, servicio y multitud de protestas de los usuarios.

Los atacantes en la sede de Ambulancias Bizkaia también realizaron diversas pintadas: "Por un nuevo convenio, segundo aviso". Los trabajadores, cerca de 360, reclaman que las negociaciones mantenidas en los últimos años para mejorar sus condiciones laborales culminen con un nuevo convenio colectivo. Ahora, sin embargo, pierden el contrato.

La Ertzaintza investiga si el enfrentamiento entre las empresas, que en principio se ceñía al plano de las adjudicaciones, se ha trasladado también a este tipo de actos. Aunque Ambulancias Bizkaia cederá el testigo a Ambuibérica, fue la primera la que ganó el concurso de la sanidad pública, después de más de dos décadas prestando el servicio. Sin embargo, al final renunció al servicio debido a una serie de cambios introducidos a última hora y que obligaban a la firma a contratar más personal.