diariosanitario.com: La Asamblea en Defensa de la Sanidad de Toledo asegura que no se rinde y advierte de que el nuevo hospital está bajo el mando de una concesionaria «que hace y deshace a su antojo sin que la Administración haga nada». Esta plataforma, formada por profesionales, pacientes y usuarios, llegó a recoger 56.000 firmas en contra de un proceso de privatización que ahora ve cómo avanza.
Con el Hospital Virgen de la Salud prácticamente cerrado, el Hospital Universitario de Toledo, con más de kilómetro y medio de distancia de puerta a puerta, arranca con los servicios de limpieza, lavandería, lencería, seguridad y parte del mantenimiento en manos de una concesionaria que, según la Asamblea en Defensa de la Sanidad, depende de fondos de inversión extranjeros. La privatización es la moneda de cambio, durante 35 años, por la obra del que en su día se anunció como el mayor hospital de Europa.
La Asamblea llegó a protagonizar un encierro de 56 días y a recoger miles de firmas en la etapa del PP, pero ahora ve que la privatización que temía avanza después de dos mandatos del PSOE. Así, los pacientes tienen que pagar 5 euros por ver la televisión; tienen que pagar el agua; la ropa se lleva a Cuenca; la comida llega de la mano de un catering y la falta de cobertura es una constante.
En este contexto, la Asamblea denuncia, haciéndose eco de las protestas de los trabajadores, que hay personal de limpieza de baja psicológica por el trato que recibe, pacientes sin acceso al wifi y niños en tratamiento oncológico que tienen que pagar 5 euros al día para ver la televisión.
«La concesionaria decide qué se compra, cuándo se compra y a quién se compra el material utilizado para la atención de los pacientes», advierte la Asamblea en Defensa de la Sanidad en un comunicado el que pone en duda la calidad de dicho material.
Mientras tanto, las familias de los niños oncológicos han decidido poner en marcha una campaña de recogida de firmas en Change.org para que sus hijos no tengan que pagar 5 euros al día para ver la televisión mientras estén ingresados.