El Porvenir: Los médicos Primaria del área sanitaria de Toledo han recibido una instrucción de su gerenta, Soledad Zuzuárregui, en la cual se les comunica que recibirán en sobre cerrado y por carretera más radiografías derivadas a clínicas privadas por el Complejo Hospitalario de Toledo, sin que la imagen que reciban puedan incorporarla a la historia clínica digitalizada del paciente a traves de la red de imagen digital que dispone desde hace diez años el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha para todos los centros sanitarios.
La instrucción dice de manera literal: "Desde el Complejo Hospitalario de Toledo nos han informado de que se están realizando ecografías en el Centro de Radiodiagnóstico A. Ballestero S.L. de Toledo. Los informes de estas ecografías se harán llegar a cada EAP (Equipo de Atención Primaria) y facultativo, en sobre cerrado y a través de nuestra ruta. Dichos informes no estarán disponibles ni en Turriano ni en la intranet del Hospital, por lo que cada profesional deberá incorporar este informe a la historia clínica del paciente de Turriano. Por favor, dad traslado de esta información a los profesionales de vuestro EAP".
De esa forma, las pruebas diagnósticas con sus correspondientes informes les llegará a los médicos toledanos en pleno siglo XXI a mano y en sobre cerrado, con lo que genera de pérdida de calidad asistencial, ya que tardan varios días en acceder al contenido de esa prueba y deben incorporar el informe ellos mismos a la historia clínica del paciente, que está digitalizada, aunque no la imagen.
Una incongruencia cuando Castilla-La Mancha está a la vanguardia en la utilización de radiología digitalizada a través de la la Teleradiología o programa Ykonos, puesto en marcha en 2004 por el anterior Gobierno socialista, para que el profesional pueda consultar desde su despacho la imagen, la exploración y el informe que se puede haber hecho en cualquier otro hospital de la región y, además, que cualquier especialista en Radiología pueda informar una imagen radiológica que se haya hecho en cualquier otro centro.
La derivación cada vez más frecuente de las pruebas radiológicas a las clínicas privadas por parte de Cospedal conlleva, por tanto, una regresión de la era digital en la sanidad pública, cuando el anterior Gobierno socialista había conseguido desterrar de las consultas esa imagen de radiografías en mano y con el facultativo "picando" el informe en la historia clínica digitalizada del paciente.
Entre los facultativos de los centros de salud consultados por El Porvenir hay un evidente malestar por esta política fomentada desde el Gobierno de Cospedal de privatizar al máximo las pruebas diagnósticas que solicita el Complejo Hospitalario de Toledo mientras infrautiliza los equipos radiodiagnósticos de los centros de especialidades (CEDT) de la provincia o los desmantela, como en el caso del CEDT de Illescas.
También advierten de que el coste de esa derivación es mucho mayor que si lo afrontase el Servicio de Salud con los medios radiodiagnósticos que dispone, como así también se recoge en informes de entidades profesionales.
En ese sentido, la Sociedad Española de Electromedicina e Ingeniería Clínica (Seeic) ha lamentado que el 80% de los hospitales españoles pertenecientes al Sistema Nacional de Salud haya optado por privatizar sus servicios de Electromedicina Clínica, a diferencia de lo que ocurre en países del entorno como Francia, Alemania, Reino Unido o Italia.
Son pruebas más específicas que con el anterior Gobierno socialista en Castilla-La Mancha se llevaban a cabo en el sistema sanitario público, salvo algunas excepciones, pero que con el PP en el Ejecutivo regional se derivan al sector privado.
Desde esta Sociedad se ha denunciado que el modelo externalizado "puede llegar a multiplicar por tres los costes asociados, por lo que a los centros sanitarios les resulta más barato contar con personal propio, al tiempo que generan más puestos de trabajo".
Informes que, obviamente, no son documentos de cabecera de los actuales gestores de la sanidad pública española ni castellano-manchega.