Acta Sanitaria: El lehendakari del Gobierno Vasco, Iñigo Urkullu, acompañado por el consejero de Salud de la comunidad, Jon Darpón, el director general de Osakidetza, Jon Etxeberria, y el director gerente de la Organización Sanitaria Integrada (OSI) Alto Deba, Andoni Arcelay, ha visitado el Hospital Alto Deba para conocer de primera mano el proceso de evaluación llevado a cabo para la obtención de la acreditación internacional Joint Commission, que también fue otorgada al centro de salud de Oñati.

El lehendakari trasladó su felicitación y agradeció el esfuerzo y el trabajo que a diario realizan en dicho hospital, palabras que hizo extensivas al personal de la Unidad de Atención Primaria de Oñati, perteneciente a esa misma OSI y que también se convierte en el primer centro de salud vasco en lograr esta acreditación.

En ambos casos, el lehendakari Urkullu destacó que “la implicación entusiasta del conjunto de los y las profesionales de la OSI Alto Deba,  donde el Gobierno vasco ha ubicado la experiencia piloto y pionera, de cara a su posterior extensión a toda la Red de Osakidetza, ha sido el elemento clave para la consecución de este reconocimiento internacional que pone en valor las altas cotas de calidad y seguridad del Sistema Público Vasco de Salud”.

Acreditación sanitaria

La Joint Commission es “la organización con más experiencia en acreditación sanitaria de todo el mundo”, según el Gobierno vasco. “Lleva más de 50 años dedicada a la mejora de la calidad y la seguridad de las organizaciones sanitarias y socio sanitarias. En la actualidad acredita a cerca de 20.000 organizaciones a nivel mundial”, añade el organismo, entre las cuáles se encuentra ahora el Hospital Alto Deba y el centro Oñati.

Para otorgar esta acreditación la Joint Commission evaluó la calidad asistencial y los contenidos centrados en la seguridad del paciente y la reducción de riesgos en los procesos clínicos y el modelo de gestión dinámico y participativo. Además de la gestión de los servicios y la asistencia,  midieron aspectos como la correcta identificación de los y las pacientes; la efectividad de la comunicación de los y las  profesionales; la seguridad de la medicación de alto riesgo; la reducción del riesgo de infecciones asociadas a la atención sanitaria; y la disminución del riesgo de lesiones en los y las pacientes producidas por caídas, todos ellos objetivos internacionales en seguridad del paciente.