PÚBLICO: El caos sigue campando a sus anchas en los servicios de Atención Primaria (AP) de la Comunidad de Madrid. Esta vez, las quejas llegan desde Carabanchel, donde uno de sus centros de salud lleva toda la semana sin ninguno de los ocho médicos adjudicados del turno de tarde. Los trabajadores aseguran que no es la primera vez que se ven en esta tesitura y alertan de que, sin un plan nuevo, los pacientes tendrán que marcharse a otros ambulatorios para ser atendidos.
El centro de Abrantes tiene una enorme carga asistencial y las listas de espera para poder acudir al médico de familia son aproximadamente de un mes de demora. Con todo el turno de tarde completamente vacío, los trabajadores temen que los tiempos se dilaten todavía más, pues cuando un enfermo acude con alguna dolencia después de la hora de comer, se le tiene que derivar automáticamente al turno del día siguiente o a otro centro.
De hecho, fuentes de la plantilla de Abrantes explican a Público que hay muchos usuarios que no tienen facultativo asignado, algo ilegal —recuerdan—. Además, afirman que los médicos, en su mayoría, doblan turnos en otros ambulatorios, donde la situación no es mucho mejor. "Nadie quiere cubrir estas plazas vacías porque las condiciones de trabajo son pésimas. Los pocos facultativos que hay están deseando irse. Es una destrucción planificada", expresan.
Tanto las enfermeras como los facultativos cuentan que no es la primera vez que se quedan sin médico: "Es imposible que la asistencia sea regular. Durante la pandemia estuvimos dos años enteros en las mismas". E insisten en su rechazo al modelo puro de enfermería que propone la presidenta de la región, Isabel Díaz Ayuso. "Sin poder diagnosticar ni poner tratamientos, la Primaria carece de sentido y, además, es imposible tirar sólo con enfermeras, con los recursos humanos de los que disponemos en la actualidad. Madrid es el territorio que menos enfermeras tiene", critican.
La delicada coyuntura de la sanidad pública madrileña ha provocado numerosas protestas y movilizaciones en los últimos meses: una huelga indefinida de médicos de AP, una huelga en los laboratorios, manifestaciones semanales, concentraciones frente a la Consejería de Sanidad, una huelga indefinida en el SUMMA 112, paros en las Urgencias extrahospitalarias e incluso una gran huelga general en todo el SERMAS, que ha tenido lugar este miércoles.
Sin embargo, el Ejecutivo regional no parece dispuesto a negociar con la mesa sectorial una ampliación del presupuesto. Ni siquiera esta semana, cuando los vecinos de los barrios y pueblos de la comunidad están celebrando una gran consulta ciudadana sobre este mismo asunto: la falta de dinero para la sanidad pública.