El boletín.com: José Ignacio Echániz vuelve a estar en el punto de mira. Los recientes problemas que afectan a la Sanidad de Castilla-La Mancha debido a los recortes, tales como el colapso de las urgencias hospitalarias o el aumento de las listas de espera quirúrgicas, han puesto en evidencia la labor del consejero de María Dolores de Cospedal, que ha sido incapaz de acallar las críticas. Más bien todo lo contrario, ya que el responsable nacional de Sanidad del PP no deja de avivar estos problemas.
Lejos de rectificar, Echániz ha ido ahondando cada vez más en el deterioro del sistema sanitario de Castilla-La Mancha con su gestión. A la decisión del Ejecutivo de Cospedal de imponer el cierre de las urgencias nocturnas, medida que no logró poner en marcha ante la contestación social, se suman ahora otras polémicas, como la surgida por la masificación de las urgencias.
La escasez de médicos en los hospitales por los recortes de la Junta ha propiciado el hacinamiento de pacientes en los pasillos de diversos centros, aunque según denuncia la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Toledo uno de los que más problemas está teniendo es el Hospital Virgen de la Salud. El colectivo señala que la situación es una “vergüenza” y que el Ejecutivo regional, lejos de reconocer su culpa, “se empeña en justificar y tapar con mentiras” esta realidad.
Tal y como ha indicado esta Plataforma, los manchegos no pueden seguir soportando la “ineficacia” e “incompetencia” de Echániz “para llevar a cabo una buena política de Sanidad pública” en la región, por lo que piden su dimisión. No obstante, Cospedal no quiere perder a su consejero de Sanidad, por lo que ha intentando hacer olvidar estas críticas anunciando que la Junta asumirá el copago hospitalario impuesto por Mato, aunque de nada ha servido esta ‘estrategia’ de la número dos del PP.
Sobre todo porque la oposición ha aprovechado estas polémicas para volver a poner contra las cuerdas al consejero de Sanidad. Uno de los primeros en hacerlo ha sido el portavoz del ramo del PSOE en las Cortes de Castilla-La Mancha, Fernando Mora, quien además de cargar contra Echániz por sus constantes “tomaduras de pelo” le ha recriminado por las elevadas listas de espera quirúrgica.
Para Mora, el consejero trata a los ciudadanos como si fueran “bobos” al ofrecer datos sin “ningún rigor” sobre el tiempo que hay que esperar para poder operarse en Castilla-La Mancha. El socialista ha criticado que la Junta hable de una reducción de las listas en diciembre de 18.622 pacientes cuando, tomando sólo las presuntas bajadas en Cuenca, Guadalajara y Toledo -1.540, 2.286 y 16.640 personas respectivamente-, la cifra ya supera el total de la Comunidad anunciado por Sanidad.
Si estos datos fueran ciertos supondría que la lista de espera en Albacete y Ciudad Real habría aumentado, algo que no ha reconocido la Junta , por lo que los datos “no cuadran”, ha recordado Mora.
Y en la misma línea se ha expresado UPyD. La formación magenta asegura que la Sanidad pública manchega “está en la UVI ” debido a la mala gestión de Echániz, que trata de culpar a elementos puntuales -como la gripe- de los problemas que afectan a los hospitales.
UPyD, que ha aprovechado para criticar la “imaginativa” solución de la Consejería de Sanidad de “provocar un éxodo de pacientes a dos hospitales privados de la Comunidad de Madrid” para reducir las listas de espera, ha afirmado que “la estrategia del Gobierno del PP en Castilla-La Mancha es clara y evidente”, y consiste en “deteriorar hasta extremos inimaginables la Sanidad pública, reduciendo hasta la extenuación los recursos humanos y materiales, para justificar lo injustificable, que no es otra cosa que poner en manos de empresas privadas la Sanidad de todos los castellanomanchegos”.