EL DIA: El Sescam ha anunciado a los trabajadores el cierre temporal de la mitad de las plantas 1ªA, 1ªB, 2ªA y 3ªB, en torno a 64 camas que se añaden a las cuatro de la UCI y a las treinta de la 2ªB clausuradas en abril. La razón de esta nueva clausura, alega la Plataforma en Defensa de la Sanidad, es que no habrá suficientes enfermeras para atender todas las camas.

Trabajadores del Cuenca II denuncian una sobrecarga de trabajo porque no se cubren ni las bajas ni las vacaciones. Animan a los pacientes a “hacer fuerza” si quieren ser atendidos en un tiempo razonable y por médicos sin estrés.  

El Hospital Virgen de la Luz cerrará en los meses de julio, agosto y septiembre otras 64 camas, aproximadamente, correspondientes a la mitad de las plantas 1ªA, 1ªB, 2ªA y 3ªB, según aseguran fuentes de los trabajadores, a quienes se les comunicó la noticia este miércoles. Las tres primeras son plantas para pacientes de intervenciones quirúrgicas, incluidas las madres que acaban de dar a luz, y la cuarta es la de pediatría, para niños.

Aunque en principio se trata de un cierre solo temporal, se suma al ya anunciado para este verano de otras cuatro camas de la UCI y al ejecutado en abril de la planta 2ªB, en este caso permanente, por el que quedaron arrinconadas 30 camas.

Por tanto, durante el verano el Hospital funcionará con prácticamente un centenar de camas menos de las 400 disponibles hasta que Luis Carretero fue nombrado gerente del Sescam y empezaron a aplicarse los primeros recortes. La reducción alcanza así a un cuarto del total. Disponibles quedarán 300, una cifra “muy ajustada”, advierten algunos trabajadores.

Fuentes del Sescam remiten a las declaraciones realizadas a la prensa el pasado 16 de mayo por su gerente. Luis Carretero, que siempre ha negado que haya un objetivo oculto de transformar el Hospital de Cuenca en comarcal, habló entonces de bajada de actividad y justificó una medida como la que se va a poner en marcha al señalar que el número de camas es variable dependiendo de la estación del año, por lo que "una  buena gestión es abrir cuando se necesitan y cerrar cuando no; que una planta esté abierta cuando no se necesita es dinero público que se tira a la basura y que no se utiliza en pacientes que lo puedan necesitar". Incluso, apuntó que “una buena gestión sanitaria hoy en día cada vez necesita menos camas porque el tipo de patología que hace años se veía con hospitalización, cada vez más se puede hacer de manera ambulatoria".

La Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública rechaza estos argumentos, y apunta que no es cierto que el verano sea una estación de menos ingresos hospitalarios en la que hagan falta menos camas: el número de hospitalizaciones es siempre imprevisible, advierten, y además sucede que en los meses estivales Cuenca recibe a muchos veraneantes, con lo que al aumentar su población hay más riesgo de ingresos.

No hay suficientes trabajadores
A su entender, el cierre es fruto de la política del Sescam de no contratar trabajadores para las sustituciones por vacaciones que se requerirán, pues solo se abre la puerta a alguna contratación muy puntual de extrema necesidad: “Se harán las que se necesiten y ni una más de las que se necesiten”, dijo en su día Carretero. Por falta de plantilla se cerrarán también algunos quirófanos este verano.

En el caso de las plantas 1ªA, 1ªB, 2ªA y 3ªB, mientras que por las mañanas está previsto que trabajen dos enfermeras y dos auxiliares en cada una de ellas, por las tardes y por las noches solo habrá una enfermera y una auxiliar, con lo cual “habrá sobrecarga de trabajo y, lo que es más peligroso, no se tiene en cuenta la posibilidad de que haya alguna urgencia”.

En la Plataforma en Defensa de la Sanidad existe además miedo a que el Sescam anuncie el cierre del servicio de Urgencias de Tarancón.  

Los trabajadores del Centro de Salud Cuenca II se cocentraron este viernes a las puertas del edificio para protestar contra los recortes en sanidad que está aplicando el Sescam. Se trata de la primera movilización de un colectivo que, no obstante, asegura que seguirá concentrándose todos los viernes. 

 En su caso, denuncian la sobrecarga de trabajo que padecen desde que no se cubren las sustituciones. Porque estas ya solo se pueden realizar a partir de los quince días de baja y ni siquiera está siendo así, aseguran. “Por cada mes de vacaciones que se coja uno de nosotros contratan a un sustituto dos días. El porcentaje de cobertura es ese: realmente, las bajas no se cubren”, señala una de las medicas de este centro de salud, muy enfadada con la situación. A su entender, en los consultorios médicos de atención primaria “no debería haber lista de espera, pero no damos a basto, y llevamos meses retrasando la atención. Esto nos hace trabajar con mucho estrés y hay pacientes que se enfadan, porque tienen que esperar más, pero es que, por mucha voluntad que le pongamos, hay cosas que son inasumibles”.

“Hay que poner los medios adecuados para que la calidad no se resienta, porque si siguen sin cubrirse las bajas aumenta el trabajo y la merma es inevitable”, señala por su parte el médico Jesús Buendía, que esta mañana ha ejercido como portavoz de sus compañeros.

Animan estos trabajadores a que los pacientes “hagan fuerza” ante las administraciones para que  los consultorios cuenten con un número de profesionales digno que les pueda prestar la debida atención. Esta mañana sí que ha habido pacientes que han acudido a la concentración, pero pocos, en torno a una veintena. Sí que ha habido también dos representantes del Ayuntamiento: los concejales Nieves Mohorte y Salvador Barambio.