EL PAÍS: La Sanidad madrileña vivió ayer martes la tanda de dos días de huelga para pedir la retirada del Plan de Medidas de Garantía de la Sostenibilidad del Sistema Sanitario Público, que incluye la privatización de la gestión de seis hospitales públicos y 27 centros de salud, entre otras medidas. Al igual que la semana pasada, las cifras de seguimiento de los sindicatos y de la Consejería de Sanidad son muy dispares, aunque hoy todavía se alejan más: apenas un 19,89% —el 22,04% en Atención Primaria y el 19,67% en hospitales— según Sanidad, y un 90% según los sindicatos —Satse, CC OO, Amyts, CSIT-UP, UGT y USAE—.
Mientras que el dato de los convocantes aumenta —la semana pasada hablaban del 85%—, las cifras oficiales descienden: son seis puntos menos que en la última jornada de huelga de 24 horas, el pasado martes 27 de noviembre, cuando la consejería cifró el seguimiento en un 25,93% del personal, —27,41% en Primaria y del 24,92% en centros hospitalarios—. Parte de la discrepancia se debe al recuento de los servicios mínimos. Este diario hizo un muestreo el primer día de huelga de la semana pasada, el lunes, según el cual un 80% de los trabajadores que podían hacer huelga en los centros de salud la hicieron y un 50% en los hospitales.
La jornada ha estado jalonada de concentraciones y actos de protesta, como una chocolatada a primera hora de la mañana a las puertas del hospital 12 de Octubre, en la que han participado un centenar de trabajadores, que han cantado villancicos con letras en defensa de la sanidad pública. Además, unos 300 médicos y residentes se han congregado en la Puerta del Sol para donar sangre como un gesto simbólico de protesta. La unidad móvil de transfusiones no llegó debido a la huelga. Los manifestantes han aprovechado para cantar consignas frente a la sede del Gobierno regional y han dado lectura al juramento hipocrático, el que realizan cuando reciben la titulación.
De ocho de la mañana a las nueve de la noche, se está llevando a cabo una campaña para visualizar la protesta en los centros de Atención Primaria, en los que Afem pide a los profesionales que estén de mínimos que pongan en su consulta una maleta y el cartel "ME VOY". Los profesionales de Atención Primaria han entregado en la Consejería de Sanidad y en el Ministerio de Sanidad 7.933 firmas recogidas en los centros de salud, que se suman a las 911.786 recopiladas la semana pasada en hospitales.
El secretario general de Satse, José Manuel Freire ha declarado a Efe que no esperaban semejante respuesta de los trabajadores, que interpreta como "un reflejo del malestar y descontento" por las medidas que ha puesto "encima de la mesa" la consejería. Según Amyts, el respaldo "está siendo más fuerte aún que en la huelga de la semana pasada por la negativa rotunda del Gobierno de Madrid a negociar", ha dicho a Efe su portavoz Pablo Martínez.
A juicio de Amyts, "el Gobierno se ha radicalizado y en sus últimas declaraciones, tanto el consejero, Javier Fernández-Lasquetty, como el presidente regional, Ignacio González han manifestado su desprecio hacia los trabajadores y su negativa a escucharlos, lo que está creando un clima de crispación". Ambos dirigentes siguen acusando de mentirosos a los huelguistas y reiterando que no darán marcha atrás y que lo único negociable es cómo se va a aplicar la reforma. En la misma línea, la portavoz de Sanidad de CC OO, Rosa Cuadrado, ha dicho que "la consejería está mostrando una cabezonería y sinrazón que está teniendo contestación masiva", con un seguimiento igual que el de la semana pasada en algunos centros e incluso más en otros.
El plan del Gobierno regional que ha incendiado la sanidad madrileña consiste, entre otras cosas, en la privatización total de la gestión de los seis hospitales que se inauguraron en 2008. Actualmente son empresas públicas de gestión mixta: toda la actividad no sanitaria depende de compañías que cobran un canon anual del Gobierno regional, mientras que el personal sanitario lo pone la Administración. La Comunidad de Madrid ha anunciado que disolverá las empresas públicas del hospital Infanta Leonor (Vallecas), Infanta Sofía (San Sebastián de los Reyes), Infanta Cristina (Parla), Hospital del Henares (Coslada), del Sureste (Arganda) y del Tajo (Aranjuez), y sacará a concurso la gestión sanitaria, lo que quiere decir que médicos y enfermeras pasarán a estar contratados por empresas.
Si bien la gestión privada ya no es una novedad en la región —los hospitales de Valdemoro, Rey Juan Carlos de Móstoles y Torrejón de Ardoz son concesiones administrativas—, el plan de Ignacio González la introduce por primera vez también en la atención primaria. Según sus planes, 27 de los 270 centros de salud se “externalizarán”: su gestión se sacará a concurso para adjudicarla a profesionales agrupados en sociedades o a empresas del sector. El objeto de las medidas es, según la Comunidad, el ahorro. La gestión privada, argumentan, es más eficiente.