EL PAÍS: La Generalitat de Cataluña analiza una primera filtración de datos tras el ciberataque al Consorci Sanitari Integral (CSI) que afectó durante tres días el funcionamiento de tres grandes hospitales y diversos ambulatorios y residencias. El grupo RansomExx amenazó al CSI que filtraría documentación personal si no se realizaba un pago monetario, algo que inicialmente el Govern puso en entredicho. Este martes, los hackers han pasado a la acción, algo que hasta ahora no había ocurrido en otras situaciones similares. El Consorci Sanitari confirma los primeros datos filtrados y admite que “se ha visto comprometida la confidencialidad de los datos”.
Los expertos en seguridad digital de la Generalitat analizan el primer contenido de información filtrado, que es de unos 52,5 Gigas volumen, una cantidad considerada “baja”, de momento, según fuentes del gobierno catalán. La Generalitat estudia ahora si los documentos desclasificados afectan a usuarios o profesionales.
El ataque de los hackers afectó a los hospitales Moisès Broggi, Dos de Maig y Creu Roja de l’Hospitalet. Los dispositivos informáticos quedaron inutilizados y el propio exconsejero de Salud, Josep Maria Argimon, admitió que el ataque había sido “grave”.
Además, también quedaron implicados el Centro de Atención Primaria (CAP) Sagrada Família, Centro de Atención Especializada (CAE), Cornellà de Llobregat, CAE Sant Feliu de Llobregat, el Hospital Sociosanitario de l’Hospitalet, CAE Ronda la Torrassa, CAP Collblanc, CAP la Torrassa, Residència Collblanc y Residència Francisco Padilla.
El CSI, una entidad jurídica pública de la Generalitat de Catalunya, en la que participa mayoritariamente el CatSalut, ya sufrió en 2020 un ciberataque que buscaba la extorsión y que afectó a sistemas como la telefonía, el correo electrónico o la radiología. Los hackeos se han dirigido recientemente a los centros sanitarios. El hospital sant Pau de Barcelona también sufrió hace unos meses un ciberataque que limitó unas horas las transferencias en el servidor en algunas especialidades, aunque no fue grave. Solo en 2020, la Generalitat sufrió 800 millones de ciberataques y en 1.000 se produjeron incidentes que provocaron la intervención de la Agencia de Ciberseguridad de Cataluña, según datos que facilitó la administración.